Hoy, este 8 de Marzo de 2011 celebramos el Centésimo aniversario del Día Internacional de la Mujer.
El tema de este año es "La igualdad de acceso a la educación, la capacitación y la ciencia y la tecnología: Camino hacia el trabajo decente para las mujeres".
En este día, a la Organización Mundial del Movimiento Scout gustaría dar las gracias a todas las mujeres que de forma voluntaria están comprometidas en apoyar el Movimiento Scout a nivel mundial.
La misión del Movimiento Scout es la educación de los jóvenes (chicos y chicas) a través de un sistema de valores basado en la Promesa y la Ley Scout. La igualdad de acceso a esta educación no formal ha sido siempre una prioridad para nuestro Movimiento.
En 1922 ya, nuestro fundador Robert Baden-Powell, ya promocionaba el aceso a la educación y la formación de niños y niñas, como se puede entender en estos extractos de un discurso que pronunció en el 3er Congreso Internacional de Educación Moral: "Las mujeres de hoy son partícipes con los hombres en el trabajo de todo el mundo. En ellas, más que en los hombres, dependen de la salubridad, tanto del cuerpo y la mente de las generaciones futuras. La educación efectiva de la mujer es por lo menos de igual valor con el de los hombres. Ellos deben estar en el entrenamiento también. "
El Día Internacional de la Mujer se estableció un año después de la primera Conferencia Internacional de la Mujer se celebró en Copenhague en 1910. No había una fecha específica, pero más de un millón de personas en Alemania, Austria, Dinamarca, Alemania y Suiza se reunieron el 19 de marzo de 1911 para conmemorar el día.
Desde entonces, se ha celebrado cada año y en 1975, durante el Año Internacional de la Mujer, las Naciones Unidas comenzaron a celebrar 08 de marzo como el día Internacional de la Mujer.
Gracias a todas las dirigentes de nuestro grupo por la responsabilidad, el empeño y el entusiasmo que ponen cada sábado.
Les dejamos la historia de una mujer que hizo mucho por el movimiento scout.
Vera Barclay CharlesworthLa autora del Manual del Lobato nació en 1893 en una familia de ocho hijos. Su padre era el pastor anglicano Charles W. Barclay y su madre la famosa escritora Florence Louisa Charlesworth (1862-1920).
Vera se unió al Escultismo en 1912, convirtiéndose en la primera Jefa Scout y más adelante, en 1914 se convirtió en la primera Akela. Puesto que mantuvo durante quince años. Durante la Primera Guerra Mundial sustituyó a muchos Viejos Lobos. Fue, junto con la hermana de Baden-Powell y su esposa, la mujer más importante del naciente movimiento scout. Y quizás más pues ella, como scouter, abrió el camino para que las mujeres tomaran cargos de responsabilidad en el Escultismo en una época difícil. Pero también es toda una leyenda para los Viejos Lobos como fundadora de la rama Lobatos. En 1915, la revista Headquarters Gazette, publicó un artículo de Vera Barclay titulado: "Como puede una señorita educar lobatos" en el que nos cuenta como fundó la primera Manada en Hertford, al noreste de Londres:
Estaba de actividades con mi Tropa scout y un montón de muchachitos venían y nos interrumpían: "Señorita, si los scouts nos quieren, estamos listos." Cuando vi a estos niños, pequeños y espabilados, saludar con los tres dedos pensé que algo debía hacerse por ellos.
En su típico estilo directo, Vera terminaba el artículo diciendo: Si cada Jefe de Tropa es capaz de encontrar a una mujer para que se haga cargo de una Manada, se encontrará con que en el futuro el Escultismo será mucho más sencillo.
En 1916, Vera trabaja como enfermera en el hospital de la Cruz Roja de Netley, cerca de Portsmouth. Por aquel entonces ya dedicaba las tardes de los lunes, miércoles, jueves y viernes, sus fines de semana y parte de sus vacaciones al escultismo. Incluso ha enganchado a su hermana Angela para que se haga cargo de su manada. El 16 de Junio de este mismo año, Baden Powell organiza una reunión en Caxton Hill donde explica que quiere rehacer su "Libro para Lobatos" ya que quiere integrar en él la obra EL Libro de la Selva de su amigo Rudyard Kipling. BP convence a Vera para que trabaje en la nueva versión. Ella se une entonces al Equipo Nacional para ocuparse de la recién creada rama Lobatos.
Contaba Vera que a partir de ese día, cada mañana al entrar en su despacho encontraba pequeñas notas de BP escritas en papel de fumar. En aquella época el papel de fumar era utilizado como anticoagulante cuando uno se cortaba al afeitarse con cuchilla. El Jefe plasmaba así las ideas que le surgían al asearse por las mañanas.
En el prólogo del Manual del Lobato Vera Barclay afirma que no serán personas solemnes que esperan un espeso manual que describa la manera de adiestrar a un niño de ocho a doce años; es decir, como formarlo hasta transformarlo en una pequeña máquina estúpida; como aplastar su espíritu deseoso de aprender bajo una pesadilla de carga de precisión académica, estas personas quedaran penosamente decepcionadas.
Vera Barclay, en un colosal esfuerzo por armonizar la práctica del lobatismo en las numerosas manadas que se crean, llegará a visitar 500 manadas para enseñar el Gran Clamor a los lobatos. Convertida al catolicismo, se esforzó en gran manera para limar asperezas entre el clero y el pujante movimiento scout. Gracias al apoyo del Cardenal Bourne, entonces arzobispo de Westminster, el escultismo creció de forma significativa en Inglaterra.
Fue ella la que concedió al Padre Sevin, fundador de los Scouts de Francia el título de Akela Leader, título que le capacitaba para formar a su vez Jefes de Manada. Vera Barclay acudirá, por cierto, en varias ocasiones a Chamarande en 1923, 1925 y 1926.
En septiembre de 1920 se despide del Equipo Nacional inglés en un artículo de la revista nacional anunciando su próximo ingreso en las religiosas de la Caridad. En la misma edición, BP le hace un caluroso agradecimiento por su labor y anuncia la concesión del Lobo de Plata, la más alta distinción scout, por los servicios prestados al movimiento. Sin embargo parece que no fue más que un descanso ya que tres años después Vera regresa al Equipo Nacional inglés para publicar nuevos manuales de formación. Escribe mucho, sobre todo libros para niños bajo el seudónimo de Margaret Beech, pero también ensayos religiosos en francés y en inglés.
En 1931 deja definitivamente sus funciones para instalarse en Francia. Sin embargo se cree que pasó la Segunda Guerra Mundial en Bognor Regis, cerca de Brighton, en Inglaterra. Más tarde regreso a Francia desde donde siguió participando en alguna forma en el Escultismo publicando artículos en la revista The Scouter.
En 1983 regresa a Inglaterra para instalarse cerca de Londres, tiene 90 años y se está quedando ciega.Murió en septiembre de 1989 a la edad de 95 años. En su funeral estuvo una representación del Escultismo Británico.
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Lemúr Sensato